------- ---------------------

..

..

        

    

                                        

6 de diciembre de 2011

Milagro en navidad

En las navidades, la gente suele reunirse en sus casas con su familia, se prepara una comida muy grande y se reparten regalos entre todos. Hay otra clase de navidad, aquella donde todas esas cosas buenas de abrir los regalos, de poder ver a tu familia reunida, se convierten en un deseo inalcanzable. Es la navidad que pasan las personas ciegas como Claudia.

Claudia es una niña de 7 años, ciega, que aún sin poder ver nada tiene muchas esperanzas de algún día ver el mundo que le rodea, esos regalos, esa familia reunida.

Para poder ver, Claudia tendría que someterse a una operación muy cara que sus padres no le pueden pagar. Sus padres tienen puestos anuncios por toda la ciudad por si alguien les puede prestar el dinero o dárselo, pero todavía no ha llamado nadie.

A pesar de todo, Claudia tiene la esperanza de que un día pueda someterse a esa operación y vivir como una niña de su edad. Claudia vive en un pequeño pueblo de Córdoba llamado Santaella, donde tiene sus amigas y su familia, que la ayudan a llevar de la mejor manera posible esta dura enfermedad. Claudia se quedó ciega a los 4 años, desde entonces su enfermedad le ha dado fuerzas para seguir adelante. Es muy estudiosa y trabaja mucho con su ordenador. En su escuela hay un aula con ordenadores para personas ciegas que utiliza muy a menudo.

Sus padres, Ester y Antonio, intentan que su hija se olvide un poco de su enfermedad en navidad. En nochebuena toda la familia de Claudia está reunida comiendo, su tía Amelia la ayuda a comer y todos parecen contentos. De repente, suena el teléfono y la madre de Claudia lo coge. Una voz dulce y aguda responde:

-Buenas noches, ¿usted es la madre de Claudia Romero Carrasco? Perdone por molestarle en estos momentos, pero me ha parecido que debía darles la noticia este día. Mire, yo soy enfermera en el hospital Reina Sofía de Córdoba. Ví su anuncio y he hablado con el médico que atiende el tipo de operaciones como el caso de Claudia y me ha informado de que no tiene ningún inconveniente en que su hija se opere gratuitamente en el hospital.

En los ojos de Ester brotaban lágrimas de alegría, lágrimas que esperaban algún día salir por la llegada de esta noticia tan deseada. Cuando Ester colgó el teléfono y comunico a la familia y a Claudia la noticia, todos abrazaron a Claudia y ella, sin creérselo todavía, abrazo a sus padres y disfrutaron esa noche mucho más todavía.

Claudia fue operada el día 28 de diciembre, a las 9 y media de la mañana. A los pocos días, llegó el momento que todos esperaban, a Claudia le quitaron las vendas de los ojos. Tardó algunas horas en ver con claridad y por fin pudo ver a su familia y amigos. Ese fue su regalo de navidad, un regalo que no todos los niños como Claudia reciben.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

--------------------- -------------------------------- ----