------- ---------------------

..

..

        

    

                                        

24 de abril de 2011

Vió y Creyó



Los relatos que narran la resurrección de Jesús, se mueven sobre todo entre dos hechos: el sepulcro vacío, y las manifestaciones personales de Jesús ya resucitado a diversas personas o grupos.

El relato que nos ofrece hoy el evangelista Juan está centrado en el primero de los casos: el sepulcro vacío. La primera en toparse con la realidad del "sepulcro vacío" es María Magdalena; "el primer día de la semana", y 'muy temprano".

Estos dos datos pertenecen a la tradición más antigua. La ausencia del cuerpo de Jesús en el sepulcro la comprueba a continuación Juan y Pedro. Aquí no se menciona ninguna manifestación personal de Jesús resucitado.

Con la introducción del "discípulo que más amaba Jesús" en el relato, nos sitúa el evangelista ante la fe pascual. Dada la notable presencia de los símbolos en este evangelio, se podría entender, que en esa especie de competencia por llegar primero al sepulcro entre Pedro y Juan, el amor es el que se impone.

Aquel "que amaba Jesús", que en Juan aparece como el "discípulo modelo", (el más amigo de Jesús) es el primero en llegar: el primero en leer el signo del "sepulcro vacío"; y el primero en creer. Hasta entonces, "todavía no habían entendido que, según las Escrituras, él debía resucitar de entre los muertos" (Jn 20,9).

"El misterio de Pascua es a la vez nuevo y antiguo, eterno y pasajero, corruptible e incorruptible, mortal e inmortal... Mortal por su sepultura en la tierra, pero inmortal por su resurrección de entre los muertos"

¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!!



No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

--------------------- -------------------------------- ----