------- ---------------------

..

..

        

    

                                        

21 de octubre de 2011

Nuestros padres espirituales

El gozo y la tristeza nunca están separados. Cuando nuestros corazones se regocijan ante un panorama espectacular, podemos al mismo tiempo lamentar la ausencia de nuestros seres queridos que no están con nosotros para verlo.

Cuando el dolor nos inunda, quizá podamos descubrir el significado de la verdadera amistad.

El gozo está escondido en la tristeza y la tristeza en el gozo. Si intentamos evitar la tristeza a todo costo, es posible que nunca experimentemos el gozo.

Si desconfiamos del éxtasis, tampoco podrá tocarnos la agonía.
El gozo y la tristeza son los padres de nuestro crecimiento espiritual.

nbas

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

--------------------- -------------------------------- ----