Irónicamente, tienes claro que esa visión está allí justamente gracias a las dificultades que experimentas. Porque si no existiese algo positivo y maravilloso contra lo cual poder compararse, algo así como una dificultad no podría existir. Tienes en ti una visión sólida y consistente respecto de lo maravillosa que podría ser la vida. Cuanto más en contacto estés con esa visión, más real será.
La realidad de tu vida, ¿puede llegar a igualar la más maravillosa y elevada visión que tengas de ella? ¡Por supuesto que puede! Piénsalo así, ¿Por qué habrías de tener semejante visión de una vida maravillosa si no tuvieses también la posibilidad de vivirla y de convertirla en realidad?
Todo aquello que puedes imaginar, puedes llevarlo a la práctica. Primero desafíate a ti mismo a encontrar esa verdadera visión y luego, desafíate a convertirla en realidad. Sin ninguna duda está allí, y es prácticamente un hecho que está al alcance de tu mano. Entra en contacto con esa elevada visión y vive la vida que estás destinado a vivir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario